domingo, 24 de mayo de 2015

Mañana báscula

Ups!

Llevo dos días siendo MALA.

Mañana toca báscula y ante mi aparecen pantallitas con números astronómicos.

Todo es cuestión de voluntad. Debo recuperar mi fuerza interior.

Así que leo esto y lo intento interiorizar. Y mañana me planto ante el dragón-báscula y sigo con la tarea marcada.

Solo no rendirse ya es un premio!!!!



Estas 10 sencillas estrategias demuestran que los mejores recursos están dentro de ti.
1)
Márcate objetivos ganadores…
  • Positivos: “Quiero ser delgada” en lugar de “No quiero estar gordo”.
  • Bajo tu control: “Adelgazaré controlando las porciones”, en lugar de “Adelgazaré cuando mi marido no compre chucherías”.
  • Específicos: “Adelgazaré si anoto cada día lo que como en la Lista de control”.
  • Compatibles con tu estilo de vida: ¿Puedes adaptar tus metas a tu día a día?
2)
Ve paso a paso: si tu objetivo final es demasiado ambicioso, divídelo en metas más pequeñas. Si quieres llegar a pesar 60 kg. siendo más activa, empieza por formar un “club de paseos” con amigos/as.
3)
Cree en ti misma: si confías en que puedes lograr tu objetivo, ya estás más cerca de él. La autoestima es como un músculo. Puedes “entrenarla” con ejercicios como utilizar frases motivadoras o premiarte por cada logro.
4)
Usa estrategias mentales: practica con antelación en tu mente las situaciones difíciles de superar. Así, tu mente prepara a tu cuerpo para el futuro desafío y puede hacer que lo superes. ¿Acaso no organizas mentalmente tus argumentos antes de una conversación delicada?
5)
Encuentra anclajes: un anclaje es un símbolo (recuerdo, prenda, imagen, objeto…) que te recuerda tu objetivo y te hace recuperar la motivación por alcanzarlo. En tu vida hay muchos anclajes: canciones que te emocionan, un vestido que te recuerda otra ocasión en que lo llevaste… Crear anclajes es elegir símbolos que, en momentos difíciles, te vuelven a conectar con un recurso interior que te ayudó en el pasado.
6)
Vive sensaciones motivadoras: imagina cómo te sentirás cuando hayas logrado tu objetivo. Anticipa tu éxito futuro en tu imaginación, con todas las cosas buenas que traerá a tu vida. Responde en tu mente a preguntas como: ¿Cómo estoy disfrutando de mi nuevo peso? ¿Qué veo cuando me miro al espejo? ¿Qué me dicen mis amigos?
7)
Háblate en positivo: “traduce” lo que dices al idioma positivo. En lugar de decir: “estoy adelgazando muy despacio, esto no acabará nunca”, di: “No importa el tiempo que me lleve, quiero ser delgado. En seis meses puedo seguir pesando lo mismo o intentar adelgazar. Ese tiempo pasará igual, así que voy a tratar de conseguirlo”.
8)
Transfórmate: sustituye las malas soluciones por alternativas saludables, como hace Juan. Cuando estaba estresado, Juan recurría a la comida. Su intención (positiva) era aliviar el estrés, pero lo intentaba de forma equivocada. ¿Qué otras cosas podía hacer? Preparó una lista: darse un baño relajante, escribir en su diario cómo se sentía, leer, encontrar una afición… Como le gustaba dibujar, buscó tiempo y se apuntó a clases de pintura.
9)
Sé asertivo: con apoyo, adelgazar es más fácil, pero a veces las personas más cercanas son quienes más nos sabotean. La madre de Eva es una gran cocinera y le insiste para que repita plato por segunda y tercera vez. Eva está intentando controlar sus porciones y le explica a su madre por qué no es bueno para ella repetir plato. Usa frases con esta estructura: “Necesito que tú (que tú no) ________, porque si lo haces yo (yo no) ________”.
10)
Cambia en 5 pasos. Deja atrás los malos hábitos que se interponen en tu camino:
1.Cierra los ojos y visualiza, bien grande y a todo color, tu imagen justo antes de seguir un mal hábito. Por ejemplo, tu mano llevándote un enorme trozo de pizza a la boca. Borra esa imagen.
2. Con los ojos cerrados, visualiza con todo detalle otra imagen de lo que haría una persona con buenos hábitos en esa situación. Por ejemplo, guardar la pizza para más tarde y salir a dar un paseo. Borra esa imagen.
3. Recupera la primera imagen, pero incluye en ella una pequeña “ventana” en una esquina con la imagen del buen hábito.
4. Cambia las imágenes de lugar. Ve haciendo más grande la de la persona que quieres ser, y más pequeña la imagen del viejo hábito. Abre los ojos.
5. Repite el proceso cinco veces, rápido. Al final de cada cambio, borra las imágenes y hazlo otra vez. Al terminar, intenta pensar en la foto del mal hábito y comprueba si es igual de nítida que al principio. Debería resultarte más difícil verla. Si eso no ocurre, repite los pasos 4 y 5.



jueves, 21 de mayo de 2015

Gorda traicionera


La traición no es querer dejar de ser gorda, son los falsos comentarios de nuestros cercanos que nos dicen que es igual y que nos quieren a pesar de los kilillos extras.

No hay que caer y dejarse ir. 

Cuando vas a la tienda la talla de la ropa no es amable, el espejo no te engatusa y tu moral queda por los suelos.


Adelgazar no es cosa de risa .... este video SÍ.



miércoles, 20 de mayo de 2015

Rompiendo las reglas

Lo malo de adelgazar es lo lento de paso del tiempo.

Una querría entrar en la ducha y dejar que el agua se llevara la grasa. Salir hecha una mujer nueva.

Lo reconozco esta mañana me he vuelto a pesar. 92.6

Lo he flipado. Aunque no es recomendable pesarse tan seguido al principio necesitas un poquito de refuerzo positivo.

Ah! El pantalón empieza a bailar!!!!

lunes, 18 de mayo de 2015

Actualización


https://elmiradordelastendencias.files.wordpress.com/2013/12/bascula-con-pies.jpg

Al final, esta mañana me he pesado.

He sido valiente y me he subido a la báscula.

93.8

Una cifra horrible pero en compración con los 96 que pensaba que pesaba me parece una gloria.

Saltitos de felicidad y a seguir con el proyecto.

YUUUUPPPPI


Post Scriptum: Hay que estar muy mal cuando 93 Kilos me parece una cifra gloriosa.

domingo, 17 de mayo de 2015

Del 96 al 69

Cuando emprendes un largo camino -lo del 25 es más un punto de arranque que un final de proyecto- has de tener una idea clara de cual es el final.

El mio?

Llegar a entrar de nuevo en una 42 de pantalón sin tener que extirparme medio cuerpo para lograrlo. No quiero volver atrás sino mirar hacia delante .... vistiendo una 42. No le pido milagros a la vida.

Como ves, fotos de ropa no pongo. Ya conozco suficiente el perímetro de mis pantalones para exponerlos en red. Lo que quiero es que el pantalón que llevo ahora me quede tan grande que tenga que ir a comprarme otro de una talla inferior y así hasta llegar a la 42.

Esto ya lo conseguí una vez y sé que solo tengo que reunir las fuerzas para concentrarme en este propósito. Un propósito a mi alcance. Y tu?




sábado, 16 de mayo de 2015

Minutos musicales

El primer día es el más dificil y el más fácil:

- Dificil subirse a la báscula y ver el total de kilos que quieres perder.
- Lo facil: Prometer seguir las reglas.

Para este día especial de inicio un poco de música